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Normas ISO

¿Por qué surgen las Normas ISO?

Las ISO nacen para promover la calidad, la seguridad, la eficiencia a nivel internacional, lo que beneficia a las organizaciones, los consumidores y la sociedad en su conjunto.

 

Las razones del surgimiento de las normas ISO, establecidas por la Organización Internacional para la Estandarización, surgen como respuesta a la necesidad de facilitar el comercio internacional y promover la seguridad, la calidad y la eficiencia en diversos sectores.

A principios del siglo XX, la proliferación de estándares nacionales y regionales comenzó a crear barreras comerciales. Cada país o región tenía sus propias normas para productos, procesos y servicios, lo que dificultaba el intercambio comercial entre ellos. Para abordar este problema, se crearon diversas organizaciones de normalización en diferentes países. Sin embargo, no existía una organización internacional que coordinara los esfuerzos de normalización a nivel global.

En 1947, se funda la ISO con el objetivo de unificar y armonizar los estándares existentes a nivel internacional.

La ISO reúne a representantes de organizaciones nacionales de normalización de más de 160 países para desarrollar y publicar normas internacionales. Las normas se basan en el consenso y la colaboración entre expertos de diversos sectores. Se elaboran mediante un proceso abierto y transparente que involucra a todas las partes interesadas, incluyendo fabricantes, consumidores, gobiernos y organizaciones de investigación.

 

 

Las principales razones del surgimiento de las normas ISO son:

Facilitar el comercio internacional: Al establecer estándares comunes para productos, procesos y servicios, eliminan las barreras comerciales y facilitan el intercambio de bienes y servicios entre países.

Promover la seguridad: Las normas  relacionadas con la seguridad de los productos, procesos y servicios ayudan a prevenir accidentes y lesiones.

Mejorar la calidad: Las normas relacionadas con la calidad de los productos y servicios ayudan a garantizar que estos cumplan con los requisitos establecidos y satisfagan las expectativas de los consumidores.

Aumentar la eficiencia: Las normas relacionadas con la eficiencia de los procesos y sistemas ayudan a las empresas a optimizar sus operaciones y reducir costos.

Facilitar la innovación: Las normas proporcionan un marco común para la innovación, lo que ayuda a las empresas a desarrollar nuevos productos y servicios de manera más eficiente.